Primer día, primeras sensaciones...

PRIMER DÍA EN DUBLÍN

Ya estoy en tierras Irlandesas. Pensé que este momento nunca iba a llegar...


Pre-vuelo

El día empezaba temprano (6:54h) me levantaba SOLA a sólo 6 minutos de que sonara el despertador. (Los nervios...).

Faltaban cosas por hacer: acordarme de que tenia que buscar el candado para la maleta, conseguir cerrarla, pesarla... Enfin... Típicos problemas pre-viajes. 


El vuelo

El camino al aeropuerto y el vuelo fue con total normalidad. Un poco de colas al hacer el check-in, pero vamos... lo normal. El embarque a la hora pero una vez en el avión... 30 minutos de retraso... Pues eso. Total normalidad...

Una vez en Dublín: el taxi y el no-teléfono

El problema fue al llegar aquí. Según había quedado con mi HM (Host Mum), tenía que coger un taxi cuando llegara y la tenia que llamar, por lo que me he apuntado en un papel el número de telefono y la dirección exacta para enseñarsela al taxista. Así lo he hecho. Al enseñarle la dirección, el taxista me ha puesto una cara que exactamente no sabría como definir pero que se entiende muy bien cuando explico que se ha pasado todos los semaforos que estaban en rojos buscando, en la guía, dónde estaba la calle (vamos, que ni idea de donde tenia que llevarme, el pobre hombre). Cuando estaba en el taxi he intentado llamar a mi HM, pero me decia que la línea no existia... (Más tarde descubrimos que tenía mal un número... ), así que he desistido rezando para que encontrara bien la casa por que sino, no tendria ningún tipo de comunicación con mi HM...

Llego a casa...

El caso es que, aun no se bien como, he llegado a casa. La abuela estaba esperando así que ha salido a recibirme (Totalmente adorable). Me ha enseñado mi habitación (pequeña pero acogedora, a la que le falta un armario, peeero que dicen que me lo traen la semana que viene)... Mi sorpresa ha sido cuando encima de la cómoda me esperaba un ramo de flores con un cartelito de "WELCOME PAULA" (so nice!), me ha dado de comer, un bocadillo de chorizo, por cierto (para que no echara de menos España, en las tres horas que llevaba fuera) y poco después de que empezara a desempaquetar la maleta ha llegado la familia al completo. 

La verdad es que no me ha sorprendido lo amables y cariñosos que han sido. Haciendo honor a la fama de los irlandeses. No podía haber tenido mejor recibimiento, ¡la verdad! 

El caso es que después de hablar un poco con ellos (lo típico del vuelo y tal) me han dicho que tenian una cita para ver una casa (que estan buscando casa nueva), así que me he quedado ya sola con mis HK (Host Kids) una hora. Los niños muy bien (el mayor de 10 y la pequeña de 9 años, por cierto). Son muy educados pero, como es normal, el primer día están bastante cortados y han intentado ver los límies a los que puedo llegar y, en algunos momentos, han dejado de hacer un poco de caso. Aún así, se han portado genial.

Cuando han llegado mis HP (Host Parents) de nuevo, se han puesto a cocinar y los niños a poner la mesa y, pese a que he preguntado, no me han dejado hacer nada! Así que he aprovechado y he estado mandando emails para anunciar que he llegado bien, hasta que la cena estaba lista. Todo buenísimo y muy sano! (De entrantes un poco de Jamón que les he traido, tomates cherrys, queso mozzarella y de plato principal pollo a la plancha acompañado por una patata hervida y ensalada!)


¿Valoración?

Así que este ha sido mi día, lleno de emociones! Nervios, tristeza, alegría, impaciencia,... De momento, estas primeras horas están siendo muy positivas! A ver como siguen los días siguientes como Au Pair en Dublín!